En estos tiempos que vivimos hay una gran preocupación por temas como la salud mundial, el plano económico y la calidad de vida en general. Son motivos suficientes para que se pare el reloj, desconectar, calmar por un momento nuestra mente y relajar el cuerpo, todo ello gracias al delicioso calor de una sauna finlandesa tradición de carácter milenario.
¿Qué es una sauna finlandesa?
Como nos comentan los expertos de saunasluxe.com, se diferencian de las saunas de infrarrojos, en que hablamos de una clase de habitáculo de carácter hermético realizado en madera, cuyo funcionamiento se realiza gracias a un sistema de calentamiento de las piedras o de las resistencias eléctricas.
En este sentido, podemos decir que su característica principal es que ofrece un baño de calor seco que, merced a las elevadas temperaturas y debido al reducido nivel de humedad que desprende, ayuda a producir la sudoración corporal, de tal forma que consigue que se libere la tensión que se acumula en el cuerpo y se relaja la mente.
Por este motivo, la sauna finlandesa se ha usado durante siglos como una gran fuente de salud y belleza cuando se quiere aumentar el bienestar.
Beneficios para la salud de las saunas de tipo finlandés
En estos años, ha quedado más que demostrado que lo que es el calor seco de la sauna finlandesa es de gran ayuda cuando queremos que se relajen los músculos, depurar o limpiar el organismo, serenando además nuestra mente. Son bastantes los beneficios saludables que oferta la sauna finlandesa.
¿Qué temperatura debe tener la sauna finlandesa?
En cuanto se calientan las rocas denominadas no arsénicas o las resistencias pertenecientes a la estufa eléctrica, lo que ocurre es que el habitáculo de la sauna finlandesa alcanza una temperatura que está entre los 70 y los 100 grados de temperatura.
La característica más importante de las saunas que son características en Finlandia es que dan calor seco, donde la humedad del ambiente es de lo más reducida, pues no llega a ser de más de un 15%.
Este factor es de lo más beneficioso y se debe tener en mente, en especial por todos aquellos que suelen sufrir problemas en las articulaciones y en los huesos.
¿Cuánto tiempo se puede estar en una sauna finlandesa? Lo mejor es que no se superen los 10 minutos para que así se eviten las bajadas de tensión.
En el caso de que ya hayas experimentado lo que son los baños de calor seco, lo mejor es estar unos 15 minutos o como máximo 25 minutos.
Si haces más de una sesión, lo mejor es hacer descansos por espacio de un cuarto de hora. En cuanto a la frecuencia de uso, lo mejor es entrar una o dos veces a la semana.
Consejos para la utilización de la sauna finlandesa
Como hemos dicho, la sauna finlandesa se recomienda para los tratamientos de calor y que así mejoren muchos problemas en materia de salid. De todas formas, tampoco significa que cualquier persona que quiera pueda usarla ni que tenga que utilizarla de cualquier forma.
Algunos beneficios que tienen y cómo se debe usar:
No tienen que usar ancianos, embarazadas, las que tienen las personas con hipertensión, cardiopatías, anorexia o los que tienen cólicos renales.
Lo mejor es ducharse antes de querer entrar en la sauna. Una vez lo hayas hecho es posible entrar desnuda o que esté envuelto en una toalla de cara a poder evitar gérmenes gracias al contacto directo del cuerpo con la madera.
Si se quiere tener acceso por vez primera a este tipo de sauna, lo mejor es hacerlo con personas que ya tengan experiencia y no haya más de 10 minutos dentro.
Cuando entre no te sientes. Es mejor tumbarse para que el cuerpo pueda adquirir la misma temperatura. Cuando salgas puedes incorporarte lentamente y quedarte sentado por espacio de un minuto de cara a que se restablezca la circulación y no marearte.
No tienes que entrar a la sauna nada más de que hayas hecho ejercicio. Vas a tener que esperar como mínimo cuarto de hora o darte una ducha fría para que la temperatura corporal baje y así no sufras un golpe de calor.
Tampoco debes hacer esfuerzos o hablar demasiado a lo largo de la sesión para que el ritmo cardíaco no se acelere.
Es recomendable salir del habitáculo cada cuarto de hora y la ducha con agua fría para la refrigeración corporal y también para la recuperación de la presión arterial. Lo mejor es ponerse a descansar de diez a veinte minutos entre las sesiones y no hacer más dedos semanales.
De la misma forma es de gran importancia beber bastante agua cuando salgas. Así te vas a hidratar por dentro y por fuera vas a recuperar la totalidad del líquido que pierdas en la sesión.
¿Cuesta mucho la instalación de una sauna finlandesa?
El mercado de las saunas es de gran amplitud y hay para todo tipo de gustos. Esto hace que los costes finales cambien mucho de uno a otro modelo.
Todo ello va a depender del tamaño y de las calidades de los materiales que se usen para la construcción, así de como si va a estar pensado para poder estar instalado a los exteriores o interiores, así si se opta por un diseño de carácter personal a medida de los denominados estándar.
Precios de las saunas finlandesas
Dependiendo de los factores, es posible la elección o construcción de saunas finlandesas que tengan buenas calidades.
Hablamos de paneles macizos en madera tropical, de abeto sueco o canadiense, modelos de cristal de templado entero.
Techos independientes, los cuáles se fueran de madera con molduras para interiores y tejados de pizarra para instalaciones de carácter exteriores.
Esperamos que después de todo lo que hemos comentado tengáis ahora sí, una idea de todo lo que es una sauna finlandesa. Así que ya sabes, si estás pensando en elegir una, ya conoces más sobre este tipo de saunas que cada vez tienen mayor aceptación entre el público que busca saunas en nuestro país y en muchas otras partes de Europa.