Cuando una persona decide hacerse empresario, lo primero que hay que pensar es que es todo un valiente. Y es que las cosas no están para emprender y lanzarte a la aventura de hacerte empresario. Entre otras cosas porque cada vez hay más trabas. Por eso, cuando alguien decide montar una empresa por su cuenta, además de mucho ánimo, hay que pensar que detrás de esa persona hay un valiente que no lo va a pasar bien. Muchas noches no dormirá y tendrá que hacer muchos números.
Y es que un empresario no solo necesita la mente para hacer cuentas y saber cómo le va el negocio. SI le salen las cuentas o no. Si tiene que pedir ayudas o no, si va a necesitar que le echen una mano desde el banco. Si va a poder pagar a todos sus trabajadores. Es decir, que la mente será una cuestión fundamental. Es el momento de no bajar la moral, de mantenerte arriba, pero claro, decirlo es muy fácil, pero hacerlo cuesta. Ya que será un momento en el que la mente juegue malas jugadas.
Ante esto, la cuestión mental juega un papel crucial cuando decidimos montar una empresa, Te vamos a contar una serie de aspectos relacionados con la salud mental que pueden influir. Y es que la salud mental es un problema que cada vez está más en boca de todos. Incluso es algo que ha llegado al Congreso de los Diputados, a través del político iÑigo Errejón. Ahora bien, no quiero quedarme solo en gente que tienes problemas por cuestiones de visibilidad o por ser vulnerable, y es que hasta un gran empresario puede tener problemas mentales. Solo los que han sido autónomos y empresarios saben lo duro que es tener que montar una empresa y no dormir por la noche.
Son muchos los empresarios que han apostado por la formación Mindfulness y la meditación para poder soportar su empresa. Son dos prácticas relacionadas que han ganado popularidad en los últimos años debido a su capacidad para ayudar a las personas a reducir el estrés, mejorar la concentración y el bienestar emocional, como nos indican desde Escuela de Crecimiento.
Confianza y autoestima
Lo primero que hay que tener es mucha confianza y pensar en uno mismo. Montar una empresa implica tomar riesgos y enfrentarse a desafíos constantes. Para superarlos, es fundamental tener confianza en uno mismo y mantener una buena autoestima. Es importante creer en nuestras habilidades y capacidades para hacer frente a los obstáculos que puedan surgir en el camino empresarial. Y es que si nosotros no creemos en nuestras habilidades, ¿Quién lo va a hacer?
Resiliencia
Es la palabra de moda de los últimos años, sobre todo tras la aparición de la pandemia, pero es la pura verdad. La capacidad de adaptarse y recuperarse de las dificultades y situaciones adversas es esencial al emprender un negocio. El mundo empresarial está lleno de altibajos, y es necesario tener la capacidad de sobreponerse a los fracasos, aprender de ellos y seguir adelante. La resiliencia nos permite mantenernos fuertes frente a los desafíos y no rendirnos fácilmente.
Gestión del estrés
Montar una empresa puede ser una tarea altamente estresante y los que hemos pasado por ese paso lo sabemos muy bien. Hay plazos que cumplir, responsabilidades que asumir y una presión constante por el éxito. La capacidad de gestionar el estrés de manera efectiva es vital para mantener un equilibrio mental y emocional. Esto implica buscar estrategias y técnicas de manejo del estrés, como la práctica de técnicas de relajación, la búsqueda de apoyo emocional y el establecimiento de límites entre el trabajo y la vida personal. Hay que ser consciente de lo que nos vamos a enfrentar.
Manejo de la incertidumbre
La incertidumbre es una constante en el mundo empresarial. No siempre se pueden prever los resultados o las situaciones que puedan surgir. Es importante tener la habilidad de aceptar y manejar la incertidumbre de manera saludable, manteniendo una mentalidad abierta y flexible, y siendo capaz de adaptarse a los cambios y tomar decisiones informadas incluso en situaciones de incertidumbre. Tenemos que ser conscientes de lo que nos enfrentamos para poder darle una respuesta.
Equilibrio trabajo-vida personal
Montar una empresa puede ser absorbente y demandante, lo que puede llevar a descuidar otros aspectos importantes de la vida, como las relaciones personales, el descanso y el tiempo libre. Es fundamental establecer un equilibrio salud. Y es que debemos recordar que hay que trabajar para vivir, no vivir para trabajar. Una frase que siempre hemos dicho y que nos tenemos que aplicar en esta época de tanto estrés laboral.
Todos estos aspectos son básicos si queremos dedicarnos a montar una empresa pero sí queremos poder dormir tranquilos por la noche. Facturas, nóminas, pagos a proveedores, Internet, redes sociales…todo suma pero hay que mantenerse en forma.