A la hora de iniciar una nueva actividad laboral debemos de tener muchas cosas en mente ya que la lista de tareas que tendremos que llevar a cabo es muy alargada y no se remata en dos o tres días, sobretodo los diferentes trámites burocráticos que tengamos que realizar en las diferentes administraciones públicas y es que estos son los que más se demorarán y por tanto, o los comenzamos con la idea aún algo verde, o al final tendremos que acabar retrasando la apertura de nuestro negocio al no disponer de las confirmaciones oficiales y con ello, de los permisos pertinentes para poder abrir.
Hoy en día, por suerte, la gran mayoría de estos trámites se pueden llevar a cabo de forma telemática, aunque, de hacerlo nosotros mismos, es posible que al final, siempre se nos quede algo sin hacer ya que no conocemos a la perfección cuales son los pasos que debemos seguir, sobretodo si somos primerizos, empresarialmente hablando.
Para poder llevar a cabo todos los papeleos de la forma correcta, lo más normal es que contemos con la ayuda de una asesoría de confianza ya que ellos conocen mejor que nadie todos los temas laborales, fiscales, jurídicos y contables y es por esto por lo que tenerlos de mano, es una de las mejores decisiones que podemos tomar antes de emprender un nuevo negocio. Ballemar Consultores es una de las mejores que podemos contratar puesto que ellos nos ofertan un servicio integral con el que tan solo nos tendremos que preocupar de ponernos a producir, y lo haremos con la tranquilidad que supone contar con los mejores profesionales a nuestro lado.
Entre las diferentes funciones que tiene una asesoría, una de las más importantes es la de servir de compañero de viaje, laboralmente hablando, y asesorar a los empresarios de tal forma que se le resuelvan todas las dudas que se le puedan ir generando con el paso del tiempo. Además, las asesorías se responsabilizan de la gestión contable, financiera o de cualquier otro carácter para el cual hayan sido contratados sus servicios. Y es que ya lejos quedan aquellas imágenes en las que veíamos al tendero o a la dependienta de cualquier tienda de barrio tomando nota de forma cuidadosa en alguna libreta de las diferentes entradas y salidas de producto, así como de los gastos y de la caja del día. Ellos conseguían mediante sus anotaciones salir airosos de sus aventuras empresariales, aunque en una gran mayoría de los casos, sobretodo en pequeñas poblaciones, ni siquiera tenían estudios que les capacitasen para ello. Sin embargo, esta gente si que entendía que era lo que estaba haciendo y la utilidad que tenía mientras que, en nuestros días, muchos de nosotros, ni siquiera sabemos interpretar una nómina.
Pues de esto es de lo que se encarga una asesoría, de que todos los trámites a los que por conocimientos o por tiempo no llegamos, estén hechos puntualmente cuando toca. Además, en un mundo en constante actualización ni siquiera en unos años la contabilidad se hará tal y como lo hacemos hoy ya que los avances tecnológicos permiten que por ejemplo el IVA, en casos de grandes empresas, se tenga que enviar en tiempo real y no a final de cada trimestre como se venía haciendo.
En definitiva, las asesorías son la mejor ayuda que todo empresario pueda tener ya que de esta forma se despreocupa de gran parte de los trámites y tiene la garantía de que las cosas se hagan cuando hay que llevarlas a cabo y siguiendo los pasos correctos, hecho que es fundamental para evitar sorpresas. Asimismo, nos sirve como una forma de trabajar más eficiente y de conocer en tiempo real cual es la realidad de nuestra compañía.
La protección de datos, otro de los temas clave para una empresa
Da igual cual sea el tamaño de nuestro negocio, si tiene empleados o no, ya que todos debemos de actualizarnos para cumplir estrictamente el Reglamento Europeo 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo en materia de protección de datos de carácter personal que ha entrado en vigor el pasado 25 de mayo y por el que todas las empresas de la Unión Europea han de tener un especial cuidado con los datos personales de sus clientes y trabajadores. Es por ello por lo que poner estos trámites en manos de una asesoría es también una buena solución para no encontrarnos en el futuro con multas que pueden alcanzar el 4% de la facturación global anual o 20 millones de euros, lo que resulte más gravoso.