Hay tres cosas que estresan por encima de todo en esta vida: un divorcio, una mudanza y una reforma. Si alguna vez has sufrido alguna de ellas, sabrás bien de lo que te hablo. Pero es que son, a excepción del divorcio, unos trámites prácticamente inevitables. Es muy raro que en la vida no nos lleguemos a mudar al cambiarnos de ciudad o simplemente al irnos de casa de nuestros padres. Y las reformas siempre se acometen, ya sea en nuestra propia casa o en el trabajo. Para esta última tenemos la solución definitiva para no pasarlo mal: encargársela a Delbin.
Una reforma puede ser muy dura, más si vivimos en la misma casa donde se hace. Esto es algo de lo que nos libramos al menos cuando vamos a montar o a reformar la oficina que ya tenemos. Pero no por ello resulta difícil llevarla. Todo depende mucho del tipo de contratista que tengamos. Yo he tenido experiencias horribles, de tener trabajadores que se traían a casa el material que les parecía sin llegar siquiera a preguntarme si era lo que yo quería. Así estoy, que deseaba copiar las molduras de madera en el rodapié que vi en una revista de muebles y acabé con unas igual de lisas que las jambas de las puertas. Vamos, que eran jambas también. Lo peor de todo es que en al poner las puertas de cocina y baño, no supieron ni medir bien el espacio y dentro de ambas habitaciones veía la madera del parqué del pasillo una vez cerrada la puerta, ya que las habían desplazado hacia el exterior.
Esto te puede pasar en cualquier momento. Puede aparecer un contratista para darte presupuesto que te engañe con su palabrería y que te creas lo que te dice, porque sobre el papel es exactamente lo que quieres: perfección en los acabados, buenos materiales… Pero luego cuando la obra empieza no cumple. Y a ver cómo le exiges tú que vaya al detalle en los acabados cuando eso no es algo que está en el presupuesto.
Es por esto que, tras estos desastres, una de las cosas que aprendí por experiencia es que hay que dejarse llevar por las opiniones de clientes anteriores. El boca a boca es clave para hacer determinados contratos. Y uno de ellos es el de las obras. Por eso quiero recomendaros Delbin, porque fue un consejo que me dieron unos amigos cuando fui a arreglar un local para convertirlo en mi oficina y la verdad es que acertaron.
Delbin, especialistas en oficinas
La compañía de reformas y creación de espacios de oficinas Delbin Ingeniería proporciona un gran abanico de soluciones para empresas y particulares tanto en Alicante como en Murcia, Valencia y Albacete. Desde el asesoramiento en el diseño de espacios y realización del proyecto, hasta la dirección de obra, instalación y ejecución.
Integran materiales decorativos y aislantes en techos, suelos, mamparas de vidrio divisorias, mamparas de madera o tablero, recubrimientos y tabiques móviles, combinando las mejores soluciones del mercado con elementos de fabricación propia de la más alta calidad y con excelentes acabados como sus armarios de oficina, sus mamparas de cristal o sus mamparas divisorias ciegas (de tablero o madera).
Pero no se queda ahí, sino que van a la última también en cuanto a las novedades tecnológicas, ya que llevan a cabo además la implantación de sistemas de domótica y control de accesos para dotar a estos espacios de un elevado nivel de confort, ahorro y seguridad.