Si hace algunos años nos hubieran comentado la posibilidad de comprar cualquier clase de producto sin necesidad de haberlo visto físicamente con anterioridad, teniendo la posibilidad de recogerlo en nuestra propia vivienda, a un precio competitivo y sin más molestias que las de hacer un simple ‘clic’, probablemente no nos lo hubiéramos creído. Lejos de ello, habríamos interpretado que quien nos lo dijera nos estaba tomando el pelo de un modo descarado. Pero la verdad es que, si nos lo comentaran hoy, no nos sorprenderíamos en absoluto.
La compra online se ha ganado el derecho a formar parte de nuestras vidas cotidianas con todas las de la ley. Comprar por Internet no es algo tan nuevo, existe desde hace más años de lo que la gente imagina. Pero es con el aumento de la seguridad con lo que de verdad ha conseguido convencer a propios y extraños. Hace años nadie se atrevía a comprar por Internet porque daba la sensación de estar poniendo en peligro nuestra cuenta bancaria. Ahora, ese peligro se ha desvanecido en una gran medida y cada día son más los que se aprovechan de las posibilidades que implica la compra online.
Según un artículo publicado por el diario El País a mediados de junio de 2017, por aquel entonces el 40% de los españoles manifestaba comprar al menos una vez al mes por Internet, lo que da buena cuenta de la gran cantidad de gente que se ha decantado por usar su móvil, su ordenador o su tablet para adquirir todos aquellos productos que son de su utilidad e interés. Estamos hablando de datos del año pasado. Datos que probablemente hayan crecido mucho durante ese año y tres meses de diferencia.
Justamente seis meses después de la publicación de ese artículo en el diario El País, El Economista informó de que, durante 2017, el volumen de compra online creció, en el global de España, un 38% hasta alcanzar la cifra de los 1950 millones de euros, una cantidad que ha hecho historia y que refleja que la compra online vive el que es el mejor momento de su historia sin lugar a dudas. Y todavía queda más. Es probable que las cifras que se están manejando en 2918 hagan crecer todos esos datos. La verdad es que sería muy extraño que esa situación no se produjera.
Las empresas también se han sumado al cambio
No hay un perfil tipo del usuario que suele hacer sus compras por Internet. Tanto es así que tampoco se puede establecer que las compras online la realicen en gran medida particulares, porque, en muchas ocasiones, están siendo las empresas las que hacen posible que los datos de compra online sean tan grandes. En efecto, la mayoría de las inversiones que realizan las personas jurídicas ya se hacen a través de Internet. Más simple, más rápido y menos problemático que una compra física tradicional, como las que conocemos desde pequeños.
A veces suele sorprender el tipo de cuestiones que suelen comprarse por Internet. De acuerdo con los datos que manejan los profesionales de Sindel, especialistas en materia de instalaciones eléctricas, es precisamente este campo uno de los que más éxito tiene a través de la red. Y es que se ha experimentado en los últimos años un repunte en el número de entidades de nueva creación que deciden confiar el montaje y el mantenimiento eléctrico de sus instalaciones a entidades a las cuales llegan gracias a la red.
Nadie sabe hasta qué punto va a llegar la popularidad de la compra y la venta online. Lo cierto es que no tiene pinta de que se vaya a desvanecer muy pronto, porque ha permitido un ahorro importante de tiempo a muchísimas empresas y ha pasado a convertirse en una actividad segura. Con esos argumentos, sorprendería bastante que existiera otra manera más rápida y más segura de hacer la compra. Prácticamente nadie confía en que haya algo que desbanque a Internet en este sentido.
La red ya es elemento por antonomasia para adquirir, como nos hemos encargado de transmitir, cualquier tipo de producto o servicio. La cantidad de posibilidades que nos acerca la red es enorme. Tanto es así que este es sin duda el mejor medio para conseguir comparar precios y servicios de un modo muy eficaz. Antes eso era bastante complicado. Antes caminábamos, en gran medida, a ciegas. Ahora tenemos un arma que nos permite saberlo todo y tener ese todo a mano. ¿Por qué no aprovecharse de ello?